¿Naranjas naturales que en 24 horas van del árbol a tu mesa? Sí, es posible. De hecho, tres años lleva ya una empresa familiar valenciana vendiendo a toda España cítricos que se recolectan en su propia finca y que se envían al domicilio del cliente en menos de un día. Las claves del negocio son la buena calidad de la fruta, la posibilidad de hacer pedidos por Internet y la ausencia de tratamientos industriales. El boca a boca ha hecho el resto.

El proceso es sencillo. Entras en la página web (my-lmn.loc), te registras y haces tu pedido. En 24 horas estarán en tu casa. Así de fácil. «Llevamos tres años en el negocio y estamos muy contentos, sobre todo por la fidelidad de nuestros clientes», señala Luis Serra, responsable de esta singular empresa.

Tradición y tecnología
«Mi hijo estuvo estudiando en Estados Unidos y vino a España entusiasmado con las posibilidades que ofrecía Internet», nos cuenta Serra. Cansado de las fluctuaciones del mercado agrario, el padre le propuso al hijo vender sus naranjas on line, una alternativa que enseguida les entusiasmó. Así surgió my-lmn.loc, una empresa pequeña y totalmente familiar, que fusiona las nuevas tecnologías con el sistema de recolección más tradicional.

«Se pueden hacer pedidos por la Red o por teléfono, aunque el 70% de ellos se hacen a través de Internet», nos explica. «El proceso es simple: las cogemos del árbol, las limpiamos con un paño y las metemos en la caja, tapándolas a la manera tradicional. Cada tarde una furgoneta las recoge y las lleva a Valencia. Desde allí se envían a toda España, sobre todo a Madrid, Barcelona y al norte de la Península».

Naranjas directamente del Mediterráneo
L´Hort de Montanya es una finca ubicada en la Ribera Baja de Valencia, situada entre la playa y la montaña, a 12 km. de la costa. Los Serra llevan toda una vida cultivando cítricos en este lugar, de clima cálido y generoso. «A la gente le gusta recibir las naranjas recién recolectadas, de hecho, algunos clientes nos las piden con rabito y hojas, e incluso con la flor de azahar, si el árbol tiene aún», nos asegura Luis Serra.

«El único problema es que, cuando acaba la temporada, no podemos vender. Por eso, sólo trabajamos de noviembre a julio. En los meses en los que no tengo ni mandarinas ni naranjas, tendría que comprar género de cámara o traer de Egipto o Sudáfrica y, a eso, me niego, porque nosotros tenemos un compromiso con nuestros clientes».

Dentro de la temporada, no hay meses fuertes ni flojos. «Tenemos la suerte de que nuestros clientes son muy fieles», señala Serra, que, además, nos explica que la mayoría de ellos son particulares, familias que compran para comer las naranjas enteras o para beberlas en zumo natural. ¿El precio? Una caja de 15 kilos cuesta entre 23 y 30 euros, dependiendo del tamaño del género. Todo el sabor mediterráneo en tu cocina y sin moverte de casa, ¿alguien da más?

Fuente: Platodeldia.com